Fig. 1: Ajuste los tornillos en los controladores de fasor de forma periódica. Ésta es la vista desde arriba de un cajón de relés que ha sido abierto. La lógica del relé, aunque es muy simple, puede hacerle perder muchísimo tiempo en la detección de problemas. El ingeniero de proyectos Joe Stack le rindió homenaje a los relés, según muestra la Fig. 1.
Un controlador de fasor en el que había tenido la oportunidad de trabajar comenzó a enmudecer de forma intermitente la salida de RF del transmisor sólo al pasar al patrón diurno. El patrón nocturno no tuvo problemas. Todos los indicadores para los contactores en el fasor y todas las “perreras” de la torre estaban iluminadas. Esto indicó que esos dispositivos fueron conmutados en el modo apropiado. Con todo, había un interruptor de enclavamiento diurno abierto en algún lugar.
En esta situación, se podría sospechar la existencia de un relé defectuoso. Joe siguió esta pista y pudo ver que todos los relés estaban funcionando correctamente, con excepción del relé de enmudecimiento de RF. Cuando Joe realizó la inspección, descubrió que los terminales roscados de tres relés estaban flojos (y como resultado de ello, también lo estaban los alambres). Estos terminales estaban conectados a los contactos de cierre que conectaban la tensión de enclavamiento de 24 VCC a través del relé de enmudecimiento de RF del transmisor.
Tras dicho descubrimiento, Joe revisó los cuatro cajones del bastidor del controlador del fasor y verificó el ajuste de todos los terminales de relé, por las dudas. Incluso una vibración escasa puede hacer que los terminales roscados tornillos del toma de relé finalmente se aflojen. El problema empieza con un funcionamiento intermitente y termina en un fallo.
Incluso si tiene un diagrama esquemático completo del controlador del fasor, Joe sugiere esbozar un diagrama de bloques o cuadro de flujo para cada modo de fasor que deba revisar. Ello reduce drásticamente la cantidad de contactos de relé visibles para usted. (Al buscar las causas de los problemas, coloque fuera de su vista las cosas que no necesite siempre que sea posible; las distracciones sólo nublan la imagen).
Cuando Joe termina, coloca su diagrama reducido en su cuaderno de documentación del sitio, registrando el problema y la solución, el inicio y la fecha. Más tarde, si surgiera algo similar, él o la persona responsable podrían saber lo acontecido anteriormente. Joe agrega: Debe tenerse cuidado con los 220 VCC en algunos controladores de fasor. Esto podría coexistir con la tensión de relé de 24 VCC, de modo que hay que estar atento a los dedos.
La Fig. 1 muestra sólo el cajón número 3 del controlador del fasor, el que también contiene la principal fuente de alimentación de 24 VCC y un fuente de alimentación de repuesto. Hay 17 relés en este cajón. Cada uno está montado en un toma que lleva la bobina del relé y los contactos a los terminales roscados de los lados del toma de relé. Hay más de 80 relés dentro de los cuatro cajones de este sistema de control de fasor en particular.
Años atrás, me llamaron de un sitio donde un controlador de fasor no estaba funcionando. Todos los equipos eran nuevos, así que me pregunté cuál sería el problema.
En el piso del gabinete del fasor estaban todos estos brillantes tornillos niquelados. Resultó ser que las vibraciones ocasionadas por múltiples ciclos de interruptor de contactor, mientras los técnicos realizaban sus mediciones de prueba de RF alternando entre los modos diurno y nocturno, aflojaron muchos de los tornillos. Finalmente se salieron los tornillos suficientes para que el controlador dejara de funcionar.
La sugerencia de Joe es buscar primero los problemas sencillos. Incluso las vibraciones generadas por contactores pesados de RF que se conmutan dos veces por día harán que los contactos roscados se aflojen. Con la emisora y la alimentación de CA apagada, ajuste estos terminales al menos una vez al año.
— John Bisset cuenta con 43 años de experiencia en difusión radial.