A 120 kilómetros hacia el sur de Buenos Aires, Argentina, se encuentra Chascomús, una tranquila ciudad cuya laguna homónima se ha convertido en el atractivo más cercano para los que necesitan huir de Buenos Aires en busca de un desahogo durante el fin de semana.
La única emisora de AM existente en la ciudad emite en los 1.520 kHz y en 90.9 MHz, se identifica como Radio Chascomús “La Voz Regional” y es parte de una iniciativa muy particular.
El dueño y gerente técnico de Radio Chascomús, Miguel Ángel Tocci, recibió en sus estudios centrales a Rubén Guillermo Margenet en amable diálogo para Radio World.
Radio World: ¿De qué manera se inicia su vínculo con el medio radiofónico?
Miguel Ángel Tocci: Con mi amigo Abel Romero, un hábil técnico electrónico, comenzamos a experimentar como si fuera un entretenimiento. Apenas existía en la ciudad una emisora de circuito cerrado por cable y no teníamos experiencia, sólo la idoneidad técnica de Abel y, en mi caso personal, la herencia de sangre de mi abuelo materno, Domingo Antonacci, un “tano” que llegó a la Argentina con su título de ingeniero en comunicaciones y fue autor de innumerables obras sobre sonido.
Por su influencia me convertí en radioaficionado de alma (LW3-DYZ) y después en radiodifusor.
RW: ¿Cómo y cuándo comienza entonces Radio Chascomús?
Tocci: Conseguí unas revistas españolas sobre electrónica y comenzamos con Abel a copiar unos circuitos de un pequeño excitador de FM de apenas 3 vatios. Llevamos las copias en papel vegetal al Diario “El Argentino”, único con sistema offset en aquella época, allí nos hicieron las películas en negativo de los circuitos con los que realizamos las primeras plaquetas del futuro equipo.
Mientras Abel soldaba componentes en el taller del fondo de su casa yo fabricaba la antena que aún hoy conservo, es una Tipo “J” de 5/8 de onda con 3 dB de ganancia de similar funcionamiento que la Slim Jim.
Después de realizar varias pruebas y ajustes de modulación, Radio Chascomús nació el 15 julio de 1988 casi como un hobby, con transmisiones regulares en 91.3 MHz.
RW: ¿Cuáles fueron las primeras reacciones de los chascomunenses?
Tocci: Hubo un gran revuelo en la sociedad de nuestro pueblo acostumbrado a la quietud hogareña. Para algunos nuestra aparición resultó una afrenta, un bocado difícil de digerir.
“¿Cómo podía ser que un par de jóvenes infligieran las leyes? ¡Deben estar locos!”, decían ciertos políticos y medios gráficos que se sentían tocados en lo comercial y periodístico. Lo cierto es que esos “loquitos”, como nos dieron en llamar, causaron preocupación a quienes se aferraban a una estructura social conservadora porque se produjo una explosión comunicacional que cambió el curso de la historia y sirvió como antecedente para que Radio Chascomús se convirtiera en emisora legal de AM y FM.
RW: ¿Cómo surgen las primeras transmisiones en AM?
Tocci: Por error… (risas). Después de dos meses de inaugurada la emisora de FM ocurrió un corte de energía en toda la ciudad. Entonces me fui al pozo de aire del edificio a conectar el equipo a la batería para seguir emitiendo hasta que vuelva la corriente de línea. Una vez restablecida la energía eléctrica, conecté por equivocación una tensión de 220 voltios a la entrada de la fuente de 12 voltios, el equipo funcionó unos segundos más.
Me llamaba la atención el chirrido extraño que producía hasta que levanté la tapa y me percaté de mi error fatal sin tener tiempo suficiente para desconectar la corriente. Entonces se produjo una explosión de los electrolíticos de la fuente que me taparon de pelusa blanca cocinándose gran parte del equipo. Nos habíamos metido en un gran problema porque teníamos programación estable y compromisos con la audiencia y nos encontrábamos sin mucho dinero para una reparación costosa que demandaría demasiado tiempo.
Afortunadamente, un amigo radioaficionado de La Plata, el ingeniero Marcelo Bértora (LU1-DWE), nos ofreció la reparación del transmisor a bajo costo pero necesitaba más de 30 días para la puesta en marcha.
Ante tal situación, él mismo nos indujo a operar en AM, mientras reparara el equipo de FM, con los argumentos de lograr mayor alcance para una cobertura regional y la económica reforma de su equipo casero de radioaficionado para las bandas de 40 y 80 metros, el famoso Berfer PP-100, de 100 vatios de potencia en portadora sin modular.
Era un transmisor valvular con dos 6DQ6 a la salida. Solamente había que reformar el sistema de sintonía variable a sintonía fija con un cristal de cuarzo que mandamos a tallar en la frecuencia de 1500 kHz saliendo definitivamente al aire el 14 de noviembre de 1988 como AM-1500 Radio Chascomús.
RW: ¿Cómo logra Radio Chascomús el reconocimiento oficial?
Tocci: Habíamos empezado como un juego y pronto nos vimos comprometidos en una actividad profesional con programación en vivo. En 1990 entramos en la regularización del entonces COMFER (Comité Federal de Radiodifusión) con los PPP (permiso precario provisorio) y cumpliendo una serie de reinscripciones hasta que en 1999 llegó el momento del llamado a concurso para una adjudicación directa.
Nos presentamos y obtuvimos la licencia para la FM. A los pocos meses salió otro llamado a concurso para una frecuencia de AM en la Ciudad de Chascomús. Creí que no podía desperdiciar la oportunidad teniendo el 50 por ciento de las cosas, los estudios y muchas ganas de hacerlo. Conseguimos socios para poder “esponsorear” (patrocinar) la llegada de la nueva emisora. Fuimos los únicos oferentes y así logramos la licencia con el indicativo LRI-271 en los 1.520 kHz saliendo al aire legalmente el 15 de julio de 2001.
RW: Desde entonces Radio Chascomús amplió su radio de influencia hacia zonas rurales y otras localidades vecinas. ¿Cuál ha sido su mayor repercusión?
Tocci: Con un transmisor Adema de 5 kW y una antena de monopolo plegado en una torre de 72 metros de altura con 180 radiales de un cuarto de onda hemos llegado a Japón.
Habíamos tenido recepciones de países escandinavos pero de Japón nunca. ¡Fue una alegría total! Nos escuchó el oyente Yukiharu Uemura de la ciudad de Odawara de quien recibimos un detallado informe de recepción incluyendo un cassette cuya grabación se entiende claramente.
Nos mandó también una carta en perfecto español, fotos de su familia, folletos y datos de su ciudad que nos permitieron advertir la afinidad que existe entre Odawara y Chascomús. Al investigar nuestra historia descubrimos que los primeros pejerreyes que llegaron a Japón fueron de aquí a través de un especialista japonés que vino procedente de la Prefectura de Kanagawa, de la que forma parte Odawara. Justamente le estoy preparando este material para enviarle junto a la tarjeta QSL que verifica su asombroso informe.
Estos contactos son extraordinarios. Los he vivido como radioaficionado y ahora también como gerente técnico de Radio Chascomús. Es difícil de explicar lo que uno siente en estos casos.
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