Desde febrero se lamenta en círculos culturales el deceso del locutor Romeo Asturias Quevedo, quien se constituyó en la voz oficial de Radio Faro Cultural 104.5 MHz, emisora dedicada a la transmisión de música clásica.
Asturias se dedicó a la locución desde que tenía 15 años y en más de una ocasión confesó que era su razón de ser y el amor de su vida. Conducía también programas de marimba pura y a menudo se le miraba dirigiendo actos oficiales como maestro de ceremonias.
Asturias pertenecía a una generación de locutores que se distinguieron por un timbre de voz grave, y el suyo era inconfundible.
Antonio Juárez, director de Radio Faro Cultural, lamentó la partida de Asturias Quevedo, pues a lo largo de 20 años tuvo a su cargo la identificación de la radio.