CIUDAD DE GUATEMALA — La radio online es un medio de comunicación global y novedoso que surgió en la década del 2000. Se dice que fue México el primer país latinoamericano en incursionar en ese campo. Años más tarde lo hizo el resto de América Latina.
De esa cuenta, cada vez son más los directorios con listados de los servidores de operación de estaciones alternativas o de radio en FM que tienen salida auxiliar para online a disposición del público. Sin embargo, muchos de estos directorios no están actualizados y varias de las emisoras que en ellos aparecen ya no están en funcionamiento.
En muchos países, así como surgieron cientos de radios online de igual forma fueron cerrando debido a que los costos de operación se fueron elevando. Guatemala no fue la excepción, ya que en este país centroamericano así como han tenido asidero las radios por Internet también desaparecen.
En esta entrevista de Mario Rivero Nájera, el comunicador Allan Dávila nos cuenta su experiencia cuando, en el año 2004, inició un proyecto para transmitir desde Guatemala a través de radio Sol Azul de México, donde tuvo éxito. Cinco años después se emancipó para montar una emisora independiente en la que invirtió una buena parte de sus ahorros y a la que bautizó como Stereo Online.
Después de dos años tuvo que abandonar ese proyecto por falta de patrocinio.
Radio World: ¿De dónde le surge la idea de hacer radio por la Internet?
Dávila: De la pasión por la radio. Soy un confeso amante de la radio y de la locución; quizá sea lo que siento que hago mejor. Ese es mi mundo y gracias al espacio que me dieron en México pude realizar mi sueño. Sin embargo, fracasé en mi proyecto independiente porque Guatemala no está preparada para las radios online: no hay estructura, ni pauta publicitaria, y los costos son elevados.
RW: ¿Cómo vivió la experiencia de transmitir desde México?
Dávila: Fue algo muy gratificante porque tuve aceptación. Mi voz y mi gusto musical le agradaron al público. Me siento muy satisfecho, porque tuve audiencia en muchos países de Latinoamérica, donde hice amigos, y porque en México me trataron bien. México fue el primer país, el precursor en toda la región, en radios online.
RW: ¿Qué hay de la experiencia de una radio para transmitir desde Guatemala?
Dávila: Como medio de comunicación fue un ��xito, porque llegué a contar con una buena cantidad de radioyentes, la mayoría jóvenes estudiantes de nivel medio, entre 20 y 25 años, que gustan de la música rock-pop. Esa audiencia crecía en época de vacaciones.
El éxito también se debió a que estuve promocionando artistas independientes de México, Argentina y Guatemala, que no tienen sello y se costean todo. Durante una semana promocionaba su música, contaba su biografía y regalaba discos.
RW: ¿Entonces, por qué el fracaso con Stereo Online?
Dávila: Durante dos años sostuve la radio con financiamiento propio, sin contar con patrocinio. Visité muchas empresas comerciales, buscando marcas identificadas con la juventud, profesionales de salud, educación, etcétera. Pero no se interesaron, me decían que el proyecto estaba bien, y que los visitara más adelante.
Los anunciantes son muy conservadores, les interesan las radios FM porque tienen presupuestos establecidos. Repito: Guatemala no está preparada para las radios online; no hay estructura, no hay pauta publicitaria y los costos son elevados.
RW: ¿Conoce, en Guatemala, de otros intentos alternativos como el suyo?
Dávila: Sí, sé de varios que han iniciado proyectos de este tipo, pero igual no pueden desarrollarse, porque los costos de operación son muy altos y no hay posibilidad de sostenerse. Para una radio online como debe ser hay que invertir, porque se necesitan: dos megas de banda ancha, equipo sofisticado para transmitir, equipo de Internet, streaming para radio de 64 kbps y programas profesionales como el SAM Broadcaster.
RW: ¿De cuánta inversión estamos hablando?
Dávila: Los costos oscilaban entre US$300 a US$500, que cubren pago de Internet, señal de radio, página Web de la radio, programa especial para radio, mantenimiento de las computadoras. Sólo por mencionar los costos básicos, porque aquí también, como parte de esa estructura, hay que agregar el alquiler de oficinas, luz eléctrica, agua, teléfono, locutores profesionales y otros.
RW: ¿Tiene planes de volver al mundo de la radio?
Dávila: Por supuesto, aunque estoy dedicado a otras tareas mi pasión por la radio y la locución sigue siendo la misma. Ya tengo pensado meterme en otro proyecto en radio, porque es lo que me gusta.