En el mercado de la radio existen programas que, debido a la persistencia incansable de sus productores y a la construcción de afinidad con la audiencia, logran mantenerse en el gusto del público a lo largo de los años. Esto también resulta un espacio atractivo para el impulso de determinadas marcas.
Uno de esos programas es “Las canciones de mi vida”, conducido en Guatemala por el locutor Carlos de Triana. Durante 15 años, el programa se viene transmitiendo, de lunes a viernes, por la frecuencia 93.3 FM de “Joya” para complacer a radioyentes que gustan de la música romántica, con canciones que no pasan de moda.
Pero más que un programa para escuchar música del recuerdo, “Las Canciones de mi vida” se convirtió en un espacio de confidencias de parte de los oyentes que mantienen una comunicación interactiva con De Triana, lo cual ya no es común en el medio, por la mecanización de la radio.
— Mario Rivero Nájera