Your browser is out-of-date!

Update your browser to view this website correctly. Update my browser now

×

Radio Nacional Costa Rica se propone planes de restauración

Esta radio pública de alcance nacional ha atravesado varias etapas desde su fundación

Por Jorge J. Basilago

SAN JOSÉ, Costa Rica — Dejar atrás el olvido y la desorientación. Convertirse en el hogar de la música nacional de todo género. Diseñar un perfil de futuro sin olvidar lo valioso del pasado.

El productor Randall Zúñiga trabaja en el estudio de grabación

N°2 de la emisora.

Desde principios de 2015, todo esto y bastante más es lo que está buscando la nueva directiva de Radio Nacional Costa Rica (101.5 MHz), envuelta en un radical período de cambio.

“Somos también una emisora en proceso de evolución, queremos migrar de los conceptos institucionalizados de la comunicación aburrida, cuadrada, simplista, por un nuevo aire de medio público, más entretenido, más dinámico y hasta más feliz”, dijo el actual director Randall Vega Alvarado.

Creada en 1979, esta radio pública de alcance nacional atravesó varias etapas desde su fundación, tanto en lo referido a su actividad específica como respecto de la estructura organizacional que la cobija. En sus primeros años funcionaba dentro de la órbita del Ministerio de Educación y su labor se concentró en la realización de dramatizados y radioteatros. Hoy, aquellas piezas se conservan — y en ocasiones se reprograman — como legado sonoro de su época dorada.

Al final de su primera década, sin embargo, se inició un paulatino abandono institucional que derivó en la pérdida del rumbo y el entusiasmo originales. “Esto ha degenerado en una falta de identidad de la emisora misma, sumida en un letargo de pura sobrevivencia, sin notorios procesos que pudiéramos enumerar como logros”, dijo Vega. Sin un perfil artístico definido ni objetivos claros, conquistar y mantener una porción determinada de la audiencia y captar potenciales anunciantes se tornó poco menos que utópico.

El técnico de grabación Javier Durán y el productor Randall Zúñiga, en plena labor en el estudio N°2 de Radio Nacional Costa Rica Más tarde, Radio Nacional pasó a integrar el Sistema Nacional de Radio y Televisión (SINART), del cual depende hasta la actualidad. Este organismo, que incluye además una agencia de publicidad y mercadeo, un canal de TV y un sistema satelital, fue el que decidió dar un golpe de timón en la historia de la estación a comienzos de este año. “Estamos en el proceso de cambiar el rumbo, de brindarle una identidad definida y fuerte, una renovación de todos los sentidos para la emisora”, dijo Vega.

Lógicamente, recomponer el perfil de la radio estuvo entre las primeras medidas de la gestión encabezada por Vega, para crear un estilo acorde a los nuevos tiempos. “Primero con la construcción de la emisora como la casa de la música nacional, y segundo con el proyecto del relanzamiento de la producción de dramatizados, basados en historias originales o en adaptaciones de obras literarias nacionales”, consideró el director.

Por una nueva ley

“La ley que regula la radiodifusión en Costa Rica data de 1954. Está no sólo desfasada sino inoperante; es un cascarón sin ningún tipo de aplicabilidad”, dijo Vega. Según el entrevistado, este vetusto marco regulatorio genera incontables violaciones y, además, no contempla la existencia de emisoras con otra lógica fuera de la comercial.

“Y tenemos la problemática de que el sector privado, que tiene en sus manos más del 90 por ciento de las concesiones del espectro, se niega rotundamente a hablar de una nueva legislación”, dijo Vega.

Por sus diferencias de intereses y perspectivas, y por apoyar la demanda de la sociedad civil de una nueva legislación, Radio Nacional renunció recientemente a su afiliación a la Cámara Nacional de Radio (CANARA).

En cambio el SINART continúa perteneciendo a la otra entidad representativa de los radiodifusores costarricenses, la Cámara Nacional de Radio y Televisión (CANARTEL), aún cuando esta comparte los lineamientos de CANARA en materia regulatoria.

En promedio, las radios costarricenses programan apenas un 3 por ciento de música producida por artistas locales, lo que para el entrevistado es “desastroso” porque implica una paralización de la industria. Por eso no es casual la decisión de Radio Nacional — que el SINART promueve en todos sus estamentos —, que desde mediados de octubre emite exclusivamente música nacional.

“Pretendemos demostrar que en nuestro país existe la suficiente música, tanto en calidad como en cantidad, para alimentar toda la pauta de una emisora”, dijo Vega.

Para lograrlo se realizaron convenios de donación con las principales asociaciones de artistas musicales, y se contrató un nuevo programador como cabeza visible del proyecto. De todas formas, Vega advirtió que lo principal será generar entre los músicos una “apropiación” del medio, que sostenga el plan a largo plazo incluso ante eventuales cambios en la dirección de la radio. “El proyecto macro es tener una emisora basada en el eduentretenimiento, con fuerte promoción de la música nacional y el resto de expresiones artísticas”, enfatizó el director.

Mientras llega ese momento, Vega celebró la mejora del ambiente laboral durante su gestión, así como la “pluralidad” que caracteriza a la estación en esta nueva etapa. “Nuestra radio en este momento tiene una gran fuerza en programas de opinión, y en los mismos participan voces de todo el horizonte político y social de nuestro país”, dijo. Aunque también Vega reconoció que deberán intervenir sobre algunos espacios realizados desde la institucionalidad — como la Asamblea Legislativa o distintos ministerios — para “mejorar su producción y refrescar su contenido”.

El operador técnico Luis Mora en la cabina de control de aire de la estación Actualmente, la radio aplica una modalidad de producción mixta, tanto interna como externa en dos variantes: por arrendamiento de espacios y por acuerdos de producción no económicos.

“Dentro de la emisora tenemos el área de productores, dedicada a la realización de los programas; el área técnica que incluye un ingeniero, técnicos de estudio y controlistas de cabina; la fonoteca; el área administrativa; y un área de servicio informativo que, aunque produce para la radio, depende de una Dirección de Informativos de todo el SINART”, dijo Vega.

“Esperamos crecer exponencialmente en audiencia, en dos años poder subir unos 25 puestos en el rating y tener la capacidad de sostener ese puesto”, se entusiasmó Vega.

Condenada a los últimos peldaños de las mediciones, Radio Nacional apunta con su renovación a seducir cada vez más oyentes. “Estamos buscando tener como público meta a las personas jóvenes, entre 18 y 35 años, con intereses culturales y políticos bien definidos, de clase media baja y media, tanto de áreas urbanas como rurales”, dijo.

Una respuesta positiva llegó desde las redes sociales, también abandonadas hasta poco tiempo atrás: con la gestión liderada por Vega, se incrementaron en un 60 por ciento los “me gusta” de la radio en Facebook, se logró una relación más dinámica con sus 25.700 seguidores en Twitter y, con la apertura de una cuenta en SoundCloud, hoy se comparten de forma más directa sus producciones.

Fachada de Radio Nacional Costa Rica La señal online también consolida el diálogo con una audiencia juvenil, aunque el entrevistado reconoció que eso todavía puede fortalecerse. “No gestionamos un sitio único de la radio como complemento de nuestra emisora”, dijo Vega, para indicar que “el SINART tiene un sitio — medio informativo, medio institucional — donde están las señales en vivo tanto de la radio como de la TV, pero no lo hemos asumido como un proyecto específico”.

“Para 2016 nuestro principal proyecto es la remodelación de los dos estudios de grabación y de la cabina de transmisión”, anunció el funcionario. Como punto de partida, Radio Nacional acaba de adquirir un transmisor RVR de estado sólido, de 6 kW de potencia, que se instalará como equipo principal en su planta del volcán Irazú. Allí funcionan otros dos transmisores RVR de 2 kW, conectados con los estudios por enlaces de radiofrecuencia RVR PTRL-LCD con antenas tipo paraflector.

A los mencionados se agregan tres equipos más: dos RVR de 2 kW (uno de estado sólido ubicado en Cerro Esperanza, Guanacaste, y otro en Santa Elena) y un OMB de 1 kW (en Buena Vista). Las antenas son tipo dipolo de panel plano.

Buscando inversión

Como emisora pública, y al igual que todo el SINART, Radio Nacional recibe un aporte presupuestario estatal. No obstante, según Vega, estos recursos sólo cubren un tercio de los requerimientos de inversión necesarios. Aspecto que, dado el abandono en que la estación estuvo sumida, se complica con la falta de confianza e interés de los anunciantes públicos o privados. “Es sumamente complejo para nosotros conseguir recursos publicitarios”, admitió el entrevistado.

“Aun con el artículo de la ley constitutiva del SINART, que exige que todas las instituciones públicas destinen el 10 por ciento de su inversión publicitaria a nosotros, no logramos que esto se dé”, agregó Vega, para remarcar que una de las metas de su gestión será lograr que se respete y cumpla con los aportes establecidos por ley. “Eso solventaría completamente el tema económico de nuestra emisora y del canal de TV”.

La cabina de operación/transmisión cuenta con una consola AEQ BC-500; ordenador genérico con Windows 7, software de automatización Audicom y de grabación/edición Adobe Audition CS-6; híbridos telefónicos JK Audio y AEV Electronics; Comrex Access Rack; reproductor de CD Samsung; micrófonos AKG D88S y auriculares Sennheiser HD-205.

Para transmisiones en exteriores emplean una consola Behringer X1832; híbridos telefónicos AEQ TLE-02D, Trialcom MXP-101 y Comrex Access2 USB; micrófonos inalámbricos Sennheiser EW100-G3 y auriculares Sennheiser HD-205.

En los dos estudios de grabación, por último, utilizan consolas Peavey (SRC4034 y MDIII respectivamente); giradiscos Technics (SL-20 y SP-25); ordenadores genéricos con Windows 7 (el primero con service pack 1) y software de grabación/edición Adobe Audition CS-6; híbrido telefónico Telemark y amplificador Marantz (estudio 2); micrófonos Maudio Nova, Shure SM58 y AKG D88S; open reel Tascam 32 y reproductor de CD Sony CDP-CE345 (estudio 1).

“Actualmente, por problemas técnicos y financieros nuestras frecuencias 88.1 FM y 590 AM están fuera del aire”, aclaró Vega. “Tenemos enfocado nuestro trabajo en levantar y reestructurar la emisora 101.5 FM, aunque ya llevamos adelante un proceso para volver a tener al aire la otra FM”, concluyó.

Close