Desde el 3 de enero, Radio La Luna (FM 99.3 MHz) modificó por completo su programación y su nombre, para convertirse en “La Deportiva”.
Dejando atrás su reconocido perfil centrado en la información y el análisis político, la emisora quiteña creada en 1996 pasó a difundir contenidos deportivos y de entretenimiento. Este cambio obedece a que el Centro de Educación Popular (Cedep), concesionario de la estación desde su nacimiento, decidió a fines de 2010 ceder la administración de la programación a la empresa Planet Audio.
Tanto los integrantes de la nueva administradora como los directivos de La Luna descartaron que la operación implique una venta de la radio, cuya concesión seguirá en manos del Cedep. “Sólo se cambiará la programación”, dijo Óscar Portilla, miembro de Planet Audio, en declaraciones a distintos medios.
Por su parte, y ante las críticas de la audiencia por el cambio, el gerente de la emisora Ataúlfo Tobar aseguró en principio la continuidad de algunos espacios tradicionales como el informativo ‘La Clave’, medida que finalmente no se cumplió.
Aunque Tobar señaló que el acuerdo con Planet Audio constituye una “alianza estratégica” orientada a “experimentar un crecimiento radial”, distintos analistas apuntaron que fue una medida de emergencia originada en las dificultades financieras de La Luna.
“No tenía ingresos propios y los espacios publicitarios no podían venir sino del gobierno que, en este caso, era uno de los principales beneficiarios de la línea política del medio”, dijo el periodista Alberto Maldonado, en un artículo publicado por el sitio web del Centro Internacional de Estudios Superiores de Comunicación para América Latina (CIESPAL).
Por otro lado, el cambio de perfil de la radio se produjo luego de conocidas las denuncias e investigaciones que enfrentan dos de sus accionistas y fundadores. Se trata de Luis Dávila y Francisco ‘Paco’ Velasco, quienes accedieron a cargos públicos dentro del actual gobierno y, en apariencia, los ejercieron simultáneamente con su actividad en el directorio de La Luna, hecho prohibido por la Constitución vigente.
Asimismo, ambos están sospechados de haber favorecido a su emisora con el otorgamiento de jugosos contratos oficiales (cuyo monto total oscila, según distintas fuentes, entre los US$700.000 y US$1,2 millones) entre 2007 y 2009.
